Decoders americanos, europeos y… (1ª Parte)

La tradición del modelismo ferroviario digital empezó en Europa de la mano de Lenz (DCC) y de Doehler & Haass (Selectrix) en los años 80. En los años 90, en Estados Unidos, la NMRA adoptó el sistema DCC como estándard, y surgieron diversos fabricantes que daban cobertura a toda la demanda de aficionados americanos. Así se fueron consolidando en la primera década del S. XXI dos grandes bloques de fabricantes de material digital: uno europeo y otro americano.

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En Europa Lenz, ZIMO, ESU, Uhlenbrock fabrican con un estándar de calidad alto y pensando en dar cobertura a un determinado material susceptible de digitalización con mucho metal y motores de tres polos principalmente fabricado en Europa.

A su vez, en Estados Unidos, los modelos americanos ya se están fabricando en gran medida en China, de la mano de Kato, Atlas y Bachmann. Los decoders se fabrican teniendo en mente modelos con más plástico, bastidores de dos bloques metálicos longitudinales y motores de cinco polos y de menor consumo. Así Digitrax, TCS, MRC, NCE y otras empresas empiezan a fabricar unos decoders que va a trabajar en unas condiciones (sobretodo de consumo de corriente) mucho más previsibles y controladas.

Conceptualmente, el decoder americano tiene una personalidad muy diferente del decoder Europeo, que tiene este último que poder adaptarse a un espectro de locomotoras mucho más heterogéneo y con mecánicas mucho más complejas que los limpios diseños de Kato, por ejemplo.

Entre 2007 y 2012 aproximadamente, el aficionado Europeo pone su mirada prácticamente por primera vez de manera seria en los decoders Americanos por diversos motivos:

  • El cambio Euro – Dólar oscilando entre 1,25 y 1,50 hace posible comprar a muy buenos precios en el mercado americano
  • Plataformas como Ebay y Paypal dan seguridad y confianza a comprador y vendedor en transacciones intercontinentales
  • Los controles de aduanas afectan muy poco al comprador particular y no suponen un obstáculo importante para realizar pequeñas compras.
  • El inicio de la crisis económica estimula el ahorro e incita ala búsqueda y compra de productos más económicos

Por estos motivos, el aficionado de aquí empieza a comprar decoders americanos que si bien quizás no son tan ideales para modelos de manufactura europea por motivos que darían para otro artículo pero que ya se han apuntado, pueden llegarse a comprar por 6, 7, 8 € menos que los equivalentes de manufactura europea.

Sin embargo el panorama cambia a partir de 2012 por diversos motivos:

  • El gobierno surgido de las elecciones de finales de 2011 instaura una subida de impuestos y cierto proteccionismo encubierto que deriva en un control mucho más estricto casi férreo de las aduanas.
  • Algunos fabricantes como Lenz o ZIMO instauran una política de contención de precios para recuperar clientes.
  • Doehler & Haass finaliza su exclusiva con Trix y se lanza a competir con los grandes Europeos con una política de precios atractiva consecuencia una política de empresa minimalista y de una ingeniería del decoder única basada en un ASIC en constante desarrollo que abarata el diseño y la manufactura de cada pieza.
  • El cambio Euro – Dolar da un vuelco radical y se sitúa en 2015 en el orden de 1,10, bastante lejos de 1,35

Todo esto produce un cambio de escenario que les acabaré de analizar en el próximo artículo